Mi compañera de trabajo, Lara, me dijo que a ver si podía hacerle unas “converse” a su niña, que las había visto por internet y era muy graciosas. Mi respuesta, inmediata, fue, “tururú” y es que las he visto muchas veces por internet, pero después veo patrones complicados o resultados muy pequeños y con los altas que son las veo incómodas…
Me puse a mirar por internet y vi
este patrón donde lo explican paso a paso y aquí os dejo las mías:
¡¡¡Las converse tienen que ser ROJAS!!!
(A veces, tengo que aprovechar cualquier hueco)
¡Tachán!
El resultado es una zapatilla que, por momentos, me parecía enorme. Miden casi 10’5 cm, lo que equivaldría a una talla de un niño de 4 a 6 meses.