Mi primer ¿peluchito?
Y llegó el retoño de Sole y, como quería ir a verlos, pensé en llevarle “un algo”.
Me puse a pensar en algo que pudiera hacer usando lo que ya sabía y salió esto:
¿Le veis las pestañas?
En realidad sería un ciempiés, ¿no?
Y ahora por el otro lado:
Y con este bicho empezó esta extraña fiebre de pensar en qué hacer, intentarlo y hacerlo!
La verdad es que quedó genial lo que le animó a empezar a crear una legión de criaturitas, cada una mejor que la anterior, que espero os enseñe pronto.